La instalación persianas en Madrid requiere un mantenimiento y una limpieza posteriores para mantenerlas siempre a punto, como si fuera el primer día de uso. Agentes climáticos, como la nieve, el agua, la humedad o el sol, pueden afectar sobremanera el rendimiento y la imagen.

Por eso, en este post no te hablaremos de instalación de persianas en Madrid, sino de algunos trucos para la limpieza una vez colocadas.

Aprovecha para limpiar las persianas cuando las lluvias nos den un respiro, es decir, en primavera y verano. Partiendo de esta base, estos elementos son, quizás, los que más se ensucian. Revisa bien qué tipo de tapa tiene el tambor: atornillado o a presión.

La limpieza es más fácil de lo que se cree. Primero, abre el tambor, es decir, el espacio que hay en la parte superior de la ventana donde se ubica una persiana y se enrolla. Una vez que hayas quitado la tapa, precisamente por estar oculto también el tambor es un lugar donde se acumula la suciedad. Retírala utilizando una aspiradora o, si no tienes, con un cepillo de mano.

El segundo paso es tener paciencia para limpiar cada una de las lamas de la persiana. Enróllala primero y ve descendiendo y limpiando cada una. El producto a utilizar varía dependiendo del material con el que estén fabricadas las persianas. Si son de PVC o plástico, usa jabón neutro y agua con un paño húmedo. Si el material es madera o aluminio, utiliza productos especiales para estas superficies acompañados de un plumero o trapo seco.

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